martes, 25 de marzo de 2008

La tabla rasa

La actualización de hoy parte de las siguientes preguntas:
¿A partir de que valores nace la personalidad de cada individuo?
¿Qué hace a algunas personas ser tan buenas y a otras tan malas?

Y a partir de estas dos preguntas empecé a buscar información hasta encontrar algo que me convenció que publico Jean-Jacques Rousseau en una de sus mas importantes obras llamada “Emilio, o De la educación” la cual es un tratado filosófico sobre la naturaleza del hombre.


En 1762 Jean-Jacques Rousseau ya dijo que cada individuo nacía libre y bondadoso, pero la sociedad corrupta que lo rodeaba lo hacía cambiar para mal. A partir de esto más tarde el anuncio la idea llamada como tabla rasa de Rousseau en la que decía que cada individuo al nacer su mente es como una tabla rasa; es decir esta vacía y no importan los genes. Y más adelante el será él encargado de adoptar los caracteres que él quiera.


Yo personalmente no sabría que pensar, pero pienso que en gran parte tendría razón, ya que cada individuo es educado de una forma y a partir de la postura que se le es enseñada se desarrollará de una forma u otra.


Esto no quiere decir que siempre sea así, pero pienso que cuando nacemos no tenemos un destino fijado ni un camino a seguir, si no que nosotros adoptares los caracteres que no enseñen o que queramos, para mas tarde utilizarlos para relacionarnos; por esto mismo Rousseau dice que cada individuo nace libre y con el carácter de la bondad pero la sociedad corrupta es el que lo hace cambiar.


No sé si me he explicado muy bien, ya que este tema no lo hemos tratado en clase y llegue a el fortuitamente, bueno gracias por leerme, y hasta otra actualización.

1 comentario:

blabla dijo...

Me parece intersante saber lo que pensaba este gran señor Jaques Rosseaus , es muy cierto a mi modo de ver, los primeros años de vida son cruciales para q se determine la educación futura de la persona, pero es cierto que el entorno en general nos afectan y pues los azares del destino juegan un papel importante. ¡¡Cada quien es dueño de su destino!!